Caso de éxito: Casa Luker y su apuesta por el cacao colombiano

Casa Luker entiende que el cacao es mucho más que un producto, es una oportunidad de devolverles el valor a quienes le dan vida al campo. Así, la empresa ha emprendido un camino para construir relaciones a largo plazo con los productores de cacao e impactar de la mejor manera las regiones.

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En los últimos años, el cultivo, producción y comercialización de cacao en Colombia ha experimentado un crecimiento significativo dentro y fuera del país. Este movimiento ascendente se ha dado gracias a los esfuerzos de empresas como Casa Luker, que han fomentado la adopción de prácticas agrícolas sostenibles y han velado por un trato justo con los productores.

Esto lo han hecho a través de proyectos como El Sueño de Chocolate, que ha permitido impulsar su visión triple impacto: económico, social y ambiental, y conectar con los productores, entender sus dolores y contribuir con el cambio.

El Sueño de Chocolate

Respondiendo a esta consigna aparece El Sueño de Chocolate, un plan colaborativo con el que Casa Luker ha transformado la cadena de valor desde el origen. Su impacto se ve reflejado en la generación de un bienestar sostenible para los productores, mediante el aumento de ingresos de la familia cacaocultora. Pero también en el fortalecimiento del tejido social y la generación del equilibrio con el medioambiente.

Durante el año 2022, el proyecto tuvo un impacto positivo y significativo en la vida de más de 3.000 familias. A través de su visión triple impacto, económico, social y ambiental, la empresa ha logrado desarrollar proyectos y acciones en áreas como el arte, la educación, el emprendimiento, la cultura, el desarrollo agrícola y la generación de empleo en diferente regiones.

Durante el año 2022, el proyecto tuvo un impacto positivo y significativo en la vida de más de 3.000 familias.

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Como parte del enfoque económico se sitúan los programas de El Efecto Cacao y Maestros del Cacao, dos enfoques que han permitido fomentar el crecimiento y la mejora en diferentes aspectos de la vida de las comunidades cacaocultoras. Así, el compromiso de Casa Luker y sus aliados han promovido el acceso a oportunidades educativas, impulsado el espíritu emprendedor, preservando y promoviendo la riqueza cultural, mejorado las prácticas agrícolas sostenibles y generado empleo digno en las zonas rurales.

El Efecto Cacao

Con el fin de potenciar su valor y brindar mejores oportunidades a los productores de cacao, sus familias y comunidades, nació El Efecto Cacao. Este programa, respaldado por USAID (Agencia de Estados Unidos para el Desarrollo Internacional), reúne a importantes actores del sector y se enfoca en fortalecer la cadena productiva del cacao, promover la asociatividad y el emprendimiento, así como impulsar la educación y la resiliencia en comunidades cacaocultoras de cuatro subregiones estratégicas de Colombia: Urabá, Bajo Cauca, Centro-Sur del Huila y Tumaco.

Dentro de los compromisos de El Efecto Cacao está incrementar la productividad y los ingresos. Esto a través de diversas estrategias que permitan el mejoramiento de la calidad de vida de los pequeños productores de cacao. Una de ellas es el fomento de la siembra nueva y la rehabilitación de cultivos existentes, brindando asistencia técnica y formación en buenas prácticas agrícolas.

A través de El Efecto Cacao se brinda capacitación y asesoramiento a las asociaciones de cacaocultores, fortaleciendo sus prácticas administrativas, técnicas y comerciales

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Mediante el apoyo con extensionismo rural y la implementación de modelos de cultivos ancla, se busca incrementar la productividad y los ingresos de los productores de cacao, sentando las bases para un desarrollo sostenible en el sector. “A través de la siembra nueva, rehabilitación, formación en buenas prácticas agrícolas, apoyo con extensionismo rural y modelos de cultivos ancla, buscamos incrementar la productividad y los ingresos de pequeños productores de cacao” comenta Andrea Molina, coordinadora regional de sostenibilidad en Luker Chocolate.

Por otro lado, está el trabajo con las asociaciones y con los emprendedores. A través de El Efecto Cacao se brinda capacitación y asesoramiento a las asociaciones de cacaocultores, fortaleciendo sus prácticas administrativas, técnicas y comerciales. Esto permite optimizar procesos y recursos, ofreciendo mejores servicios a los asociados y socios productores del proyecto. Además, a través del apoyo en emprendimiento, las comunidades y familias cacaocultoras tienen la oportunidad de desarrollar sus ideas de negocio, convertirlas en realidad y generar fuentes adicionales de ingresos, impulsando así la autonomía económica y el desarrollo local.

Finalmente, como parte del programa está el componente educativo con el que se busca mejorar el acceso a una educación de calidad para niños, niñas, jóvenes y adultos. Con el apoyo de la Fundación Luker se han desarrollado programas como Aprendamos Todos a Leer, proyecto de formación lectiva y Descubre Cacao, entre otros, con el fin de fortalecer las competencias académicas y proporcionar mejores oportunidades para el futuro.

Maestros del cacao: una apuesta por las prácticas agrícola responsables

Creado con el fin de reconocer y recompensar a los productores y asociaciones que se esfuerzan por cultivar cacao de manera sostenible, el programa no solo busca aumentar los ingresos y mejorar la calidad de vida de las familias productoras de cacao. También está enfocado en fomentar la conciencia ambiental y garantizar la continuidad de esta valiosa tradición para las generaciones futuras.

Maestros del Cacao consta de 6 niveles y 36 retos, que abarcan aspectos medioambientales, sociales y productivos. Durante un período de seis meses, los productores y asociaciones implementan las prácticas sostenibles seleccionadas previamente. A medida que completan los retos, envían evidencias o las muestran durante las visitas a sus fincas, acumulando puntos registrados en un pasaporte.

Además, los productores ganan puntos por cada kilogramo de cacao que venden, incentivando así la producción sostenible. Al finalizar los seis meses, tanto los productores como las asociaciones pueden canjear sus puntos por diversos premios. Sobre este punto, Andrea Molina destaca que estos premios no los determina Luker, sino que los eligen los mismos productores de acuerdo con una oferta de diferentes premios. “Son ellos quienes escogen lo que más necesitan. Pollos de engorde, gallinas ponedoras o mercados, pero también pueden elegir insumos como fertilizantes y herramientas que les hagan falta, entre otros productos” cuenta.

Maestros del Cacao se lleva a cabo en tres ubicaciones con características únicas y desafíos específicos: Huila, Caldas, Sur de Bolívar, Casanare y Tumaco.

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El programa de reconocimiento de prácticas agrícolas sostenibles de Casa Luker es un ejemplo inspirador de cómo las empresas pueden impulsar la sostenibilidad y premiar los esfuerzos de los agricultores comprometidos. Mediante la promoción de prácticas agrícolas responsables, Luker no solo busca mejorar los ingresos y la calidad de vida de las familias productoras de cacao, sino también proteger el medioambiente y fomentar la conciencia ambiental en las comunidades.

Esta iniciativa demuestra que el cacao sostenible es posible y ofrece un camino hacia un futuro próspero y equilibrado tanto para los agricultores como para las generaciones futuras que disfrutarán del fruto del cacao.

Impacto social y ambiental

El triple impacto es un concepto que ha tomado mucha fuerza en los últimos años. Hoy, las empresas cada vez son más conscientes de las contingencias sociales, ambientales y económicas, y del rol que cada uno tiene. Esto ha generado una necesidad de generar valor no solo para los accionistas de las empresas y los empleados, sino también para la comunidad y el ambiente.

De esta manera, además del enfoque económico liderado por Maestros del Cacao y El Efecto Cacoa, Casa Luker ha desarrollado programas en los enfoques social y ambiental, reasegurando así su compromiso con el desarrollo integral de las regiones. Dentro de estos programas están:

• Enfoque social: Chocokids, Música, Arte y Cacao; Educando para la Paz, Descubre Cacao, Emprendiendo Sueños y Sumando al Futuro, entre otros.
• Enfoque ambiental: Guardianes del Bosque Seco Tropical, Amigos de la Naturaleza, Microcuencas para el agua, Agua para las escuelas y Vigías Ambientales, entre otros.

Gracias a la consolidación de estos proyectos en diferentes partes del país, recientemente, Casa Luker recibió la calificación de Empresa B, lo que reafirma su compromiso con la sostenibilidad.